Gerencia
El Arte de Gerenciar
Un correo que me enviaron dentro de la empresa, vale la pena leerlo y reflexionar sobre el arte de gerenciar:
En muchas organizaciones, particularmente en las pequeñas y medianas, con frecuencia encontramos un denominador común: tareas gerenciales que no son desarrolladas adecuadamente, directivos disconformes con los resultados obtenidos por sus gerentes, y gerentes que no comprenden claramente cual es su trabajo.
La falta de comprensión de cual es realmente el trabajo de un gerente esta tan extendida que vale la pena analizar esta situación.
La supervisión
Las organizaciones existen para llevar a cabo tareas.
Estas tareas conducen a alcanzar metas y objetivos -uno de los cuales es ganar dinero, en las organizaciones con fines de lucro.
Para lograrlo hacen falta distintas cosas: una definición clara del negocio, una estrategia adecuada para cada negocio emprendido, una estructura adecuada para ejecutar esa estrategia, y personas competentes que realicen del modo apropiado las tareas para las cuales han sido contratados.
En las organizaciones mas simples no existe la función de supervisión. Constan de una sola persona que ejecuta todas las funciones; este es el caso de un puesto callejero de venta de “hot dogs”.
Cuando en la organización trabaja mas de una persona existe la función de supervisión, probablemente la mas importante en organizaciones complejas.
Un supervisor es una persona que no solo es responsable por su propio trabajo, sino también por el trabajo realizado por sus subordinados. El cargo formal de un funcionario puede tener cualquier nombre: jefe, gerente, gerente general o presidente. Pero si tiene personas a su cargo y debe responder por el trabajo de ellos, esa persona es un supervisor.
Las tareas del jefe
¿Que esperan las organizaciones de los capataces, supervisores, jefes, gerentes y presidentes que contratan? Muchas veces no lo saben realmente. Pero las tareas de todo jefe incluyen:
1. Tener claro su propio trabajo, y el contexto amplio en el que deben desarrollarlo. Esto les permite asignar adecuadamente tareas a sus subordinados.
2. Desarrollar un plan para alcanzar sus objetivos.